Por José Viurquis G.
Tras llevar la danza mexicana por todo el mundo, Lolita Menchaca, plasmó sus huellas en Plaza de las Estrellas, al lado de Juan Gabriel, Celia Cruz, María Félix, Cantinflas, José José, Thalía, entre otros.
Lolita Menchaca, quien reside en Ciudad Satélite, Naucalpan, dirige el Ballet Folclórico del Estado de México, considerado entre los mejores cinco del mundo, tal vez de los dos, porque en esta lista están el de Amalia Hernández, los de Jalisco y Guanajuato y un Chino, y por esa trayectoria ahora las huellas de sus manos están entre las de los grandes ídolos de México.
En Plaza Galería, que siempre luce brillante, reconocida a nivel mundial por guardar las mejores huellas de una ballena, las de Keiko, inició el evento con la entrega del reconocimiento a Lolita, luego las Mañanitas para Penélope Menchaca, la reconocida conductora que ha enlazado a miles de jóvenes, y ahora madrina de las Huellas.
Luego, en el tiempo en que Lolita Menchaca mantuvo sus manos en el cemento, recordó sus inicios como bailarina de ballet, a los ocho años, y ya adulta, casada brincó a la danza mexicana, la que penetró primero su piel para ahora llevarla hasta en los huesos y convertirse en la mayor realización pues Lolita está en lo que más le gusta.
Y ahora le llegó este reconocimiento por darle difusión mundial al ballet folclórico, por el que han pasado miles de bailarines y bailarinas. En el Estado de México inició en el ballet infantil y juvenil de Naucalpan, para sumar 45 años continuos entre los mexiquenses, con el Ballet folclórico del Estado de México, en estos años.
Sus primeros zapateados fueron en Bellas Artes, en la Academia Mexicana de la danza, bajo la dirección de la maestra Nohemí Marín y Tizoc Fuentes, luego vinieron otros maestros que la llevaron a perfeccionar su estilo, para convertirse en maestra de generaciones en el ballet Folclórico del Estado de México.
Este mes, el ballet mexiquense estará en Sáo Luis, Brasil, en un festival junto a los ballets más reconocidos de Italia, Estados Unidos y el país anfitrión.
Pero también ha llevado el folclor mexicano a España, Italia, Argentina, entre otros, donde muestra la música, la danza y los escenarios a través de galerías que ella misma diseña.
