Los trabajos de demolición de casas afectadas por derrumbe no han podido iniciar porque sigue el desprendimiento de rocas del cerro del Chiquihuite, Tlalnepantla, donde tres personas murieron y otra resultó herida.
El 10 de septiembre hubo un derrumbe de piedras y tierra del cerro que destruyeron por lo menos tres casas, pero 286 tuvieron que ser desalojadas ante los continuos desprendimientos de grandes rocas.
Por el momento, trabajadores, auxiliados con camiones torton, preparan los espacios para poder confinar el material de las demoliciones de casas y de las rocas que pueden rodar sobre otras viviendas.
Además hay tres máquina que descargan material y nivelan el suelo para la circulación de las unidades que llevarán el cascajo.
En el sitio, empleados del Ayuntamiento de Tlalnepantla auxiliaron en la mudanza de tres familias que residían en la colonia Lázaro Cárdenas Segunda Sección y decidieron reubicarse para evitar riesgos.
Hasta el momento, son 275 familias, de 286 afectadas, que han acudido para recibir el apoyo que ofrece el gobierno de Tlalnepantla, para que puedan rentar alguna vivienda.
