Los comerciantes del centro de la Ciudad de México pierden 15 millones de pesos diarios por los cierres de vialidades a causa de manifestaciones, Fiestas Patrias y próximamente la visita de presidentes de Latinoamérica.
Advirtieron que de no ser atendidos, los más de 5 mil establecimientos que se encuentran dentro de los polígonos de calle Madero, 5 de Mayo, 16 de Septiembre, Tacuba, 5 de Febrero, Palma, 20 de Noviembre, Corregidora y Pino Suárez, serán abiertos después de las Fiestas Patrias, y retirarán las vallas con las que cercan el sitio para que haya movilidad.
Así como lo hicieron el 14 de septiembre, los comerciantes y empresarios del Centro Histórico al abrir los pasos peatonales, retirando las vallas utilizadas por la policía para mantener el cerco del Primer Cuadro, exigieron a la Jefa de Gobierno Claudia Sheiunbaum, el cumplimiento de los acuerdos de finales de agosto respete el libre paso y permita la recuperación económica en la zona.
El martes unos 50 dueños y encargados de establecimientos mercantiles, en el cruce de las calles Palma y Madero –uno de los afluentes peatonales más importantes-, en donde la policía mantiene restricciones de acceso al Zócalo, se manifestaron con pancartas y mostraron su enojo por el incumplimiento de la misma normatividad publicada por la Jefatura de Gobierno.
El gobierno capitalino, en un comunicado oficial se comprometió a que los establecimientos trabajaran del 11 al 14 de septiembre de las 9:00 de la mañana hasta las 21:00 horas, por lo que los comerciantes exigieron a la policía la apertura total del paso peatonal, y procedieron a quitar las vallas.
Acerca de las disculpas de la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum al sector empresarial y comercial del primer cuadro, luego de que dio a conocer las restricciones a la movilidad, por los actos que se realizarán en el Palacio Nacional en el marco de la visita de mandatarios miembros de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), dijeron que con disculpas no se paga la renta ni la nómina y mucho menos los impuestos.
Consideraron necesaria una partida para la indemnización a los dueños y trabajadores de los establecimientos, por las pérdidas económicas que tendrán por las restricciones a la movilidad.