Con el Semáforo Naranja, que impondrá el lunes el gobierno del Estado de México, podrán retornar servicios religiosos cuidando el número de personas, además de las actividades físicas y deportivas al aire libre, con las medidas preventivas necesarias, al registrarse 2 mil 411 contagios de COVID-19 de los últimos cuatro días, 602 en promedio, por 595 muertes diarias de la semana pasada.
El gobernador Alfredo del Mazo Maza precisó que en esta etapa continúa la apertura los pequeños negocios y la industria manufacturera, así como los hoteles, restaurantes y los centros comerciales con un aforo máximo del 30 por ciento.
En la primera reapertura, del 6 al 2 de julio hubo más de 4 mil nuevos contagios en el Estado de México, con la actividad de hasta 620 mil unidades de negocios no esenciales, todavía en Semáforo Rojo. El incremento de contagios fue de 9.8 por ciento en casos positivos confirmados, las muertes se fueron 7 por ciento arriba.
En esa semana los contagios llegaron a 42 mil 372 casos positivos de coronavirus, sin embargo, tan solo en la semana del regreso de actividades hubo incremento de más de 9 por ciento en casos un total de 4 mil 171 nuevos casos.
Ayer los enfermos sumaron 44 mil 783, mientras que 10 mil 783 son observados en su casa, mil 483 en hospitales y a mil 425 los atienden en otras entidades. Hasta ayer, las defunciones llegaron a 5 mil 524 personas y mil 505 en otros estados, a 16 mil 199 los clasificaron como casos sospechosos y 46 mil 63 resultaron negativos al coronavirus.
El gobernador mexiquense, Alfredo del Mazo Maza apuntó que “es importante un equilibrio cuidando la salud de todos, que es una prioridad, pero también apoyando a la economía familiar, eso quiere decir, ir retomando las actividades poco a poco de manera segura.
“El avance al Semáforo Naranja, es un paso importante, pero también una responsabilidad porque seguimos en un riesgo de alto de contagio, es muy relevante que sigamos cuidando todos de todos”, reconoció.
Sostuvo que debemos ser muy responsables para cuidar de la salud de la población y a la par la economía familiar, por lo que pidió seguir las medidas sanitarias como la sana distancia, lavado de manos frecuente y el uso del cubrebocas.
“A partir del próximo lunes 20 de julio pasamos al Semáforo Naranja y continuamos con el regreso seguro a las actividades” expresó, y aseguró que el Estado de México tiene cuatro semanas en que ha disminuido la hospitalización de personas por COVID-19.
“Hoy en día tenemos una ocupación del 45 por ciento y se han dado de alta a más de 23 mil pacientes que se han recuperado. Esto ha sido posible gracias al esfuerzo de todos, a la responsabilidad, a la solidaridad durante estas semanas y meses difíciles.
El ritmo de contagios “ha presentado una disminución, lo que permite que en la entidad continúe con el regreso seguro de sus actividades”, reitera.
