Hola amigos y amigas. Te ha pasado que tu pareja “te pide tiempo” Seguro que ante esta pregunta sientes un gran desconcierto y temes por que la relación se acabe. Entonces qué hacer ante este escenario. De nada sirve reclamar o presionar o incluso amenazar para evitar la separación.
Esto sólo tendrá un efecto de enojo y hasta fastidio en la pareja que desea el tiempo. La otra pareja queda en el momento lastimada y si es del tipo codependiente, tratará de retener a la pareja con todos sus medios posibles, casi siempre poniéndose en un papel de víctima, pues siente que al darle tiempo las cosas sólo empeorarán o se enfriarán. Lo primero que se piensa es que hay otra persona de por medio y que el darle tiempo es tanto como rendirse, no luchar y perder.
Pero nada parecido sucede con la otra parte, ya que el que pide tiempo lo que necesita es espacio para sentir que no se asfixia y sentir libertad. El que toma la decisión de pedir el tiempo lo hace probablemente porque se siente inconforme con lo que está viviendo en la relación.
Así entonces la otra parte tiene dos opciones: abrirse y aceptar lo que el otro desea o resistirse y presionar. Mientras el otro sienta que lo están presionando, más se sentirá asfixiado; así que lo más conveniente será que la otra pareja haga un gran esfuerzo y con serenidad preguntarle qué es lo que más le disgusta de él o ella que hace para que en el tiempo pedido, pueda haber reflexión sobre el problema.
Evitar preguntar por cuánto tiempo y mejor asentar que durante ese tiempo dado ambos pueden conocer otras personas o reconsiderar la relación y ver qué pasa. En pocas palabras, esta actitud generará sorpresa y hará que la otra persona se quede conectada con la parte asertiva y segura de su compañero(a).Esto funciona mejor que pedir explicaciones ya que del otro modo solo obtendremos más pretextos y más enojo.
“Te quiero mucho PERO ….. “ es una oración que nos debe poner en alerta de que algo no está fluyendo y hay incomodidad en nuestra relación de pareja. Si lo manejamos bien, es decir, sin hacernos las víctimas y tomándolo como una prueba para la relación, es más probable que haya una segunda oportunidad para recomenzar pero con más fuerza y amor.
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