Por Daniel Sámano
Arranca la semana uno de la NFL, tras siete meses de ausencia. En el duelo inaugural, las Águilas de Filadelfia comienzan su camino rumbo al bicampeonato con un encuentro divisional ante los Vaqueros de Dallas.
Durante la temporada baja, Filadelfia se despidió de su coordinador ofensivo Kellen Moore, quien asumió el cargo como entrenador en jefe de los Santos de Nueva Orleans. Además, renovaron su defensiva al dejar en libertad al defensivo Darius Slay. El jugador que trabaja como Cornerback, pasó cinco temporadas con los actuales monarcas y recibió tres convocatorias al Pro Bowl.
En cuanto al ataque, el corredor Saquon Barkley busca mantener el ritmo que lo llevó a ser elegido como el Jugador Ofensivo del Año en 2024. En la campaña anterior, el ex jugador de los Gigantes corrió para 2,005 yardas y alcanzó la zona de anotación en 13 ocasiones.
En contraparte, los Vaqueros de Dallas entraron en un periodo de cambios. Tras quedarse fuera de la postemporada, la directiva puso fin al ciclo de Mike McCarthy como head coach y designó a Brian Schottenheimer. Con 28 años de carrera en diversos roles ofensivos, se convirtió en el décimo entrenador en jefe en la historia de la franquicia.
El reto de devolver a la escuadra de la estrella solitaria a los primeros planos comenzó con la salida de Micah Parsons, líder defensivo que no logró acordar su renovación con el dueño Jerry Jones y solicitó un intercambio. Los Packers fueron quienes cumplieron con las exigencias al ofrecer dos selecciones de primera ronda y al defensivo Kenny Clark, un elemento que se caracteriza por presionar al mariscal de campo y tener anticipación para bloquear el juego terrestre.
Las complicaciones en la construcción del roster también alcanzaron al ataque, luego de que el liniero Zack Martin decidiera ponerle fin a su carrera como profesional. Sin embargo, no todo son malas noticias, como parte del plan para darle más armas a Dak Prescott, los Cowboys retuvieron a CeeDee Lamb y se reforzaron con la llegada de George Pickens, procedente de los Pittsburgh Steelers.
En un nuevo capítulo de esta histórica rivalidad, Dallas buscará arruinar la fiesta de los campeones y, de paso, poner fin a la racha de 11 triunfos consecutivos que Filadelfia tiene como local en el Lincoln Financial Field.
