Baja el secuestro 31 por ciento en el Estado de México

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Dieron antecedentes de los inicios del secuestro, al menos ocho formas de plagio, así como un sinnúmero de recomendaciones para evitarlo, y algunos de los empresarios de la Asociación de Empresarios y Ciudadanos del Estados de México (ASECEM) se quedaron con la pregunta ¿Si tanto saben, por qué no acaban con él?

El presidente de la ASECEM, Raúl Chaparro, mencionó algunos hechos en los que hubo intervenciones heroicas de elementos de la Comisión Estatal de Seguridad Ciudadana y a quienes entregó reconocimientos.

Raúl Chaparro, presidente de ASECEM, da reconocimientos a elementos de la Comsión Estatal de Seguridad
Raúl Chaparro, presidente de ASECEM, da reconocimientos a elementos de la Comsión Estatal de Seguridad

El coordinador General de Combate al Secuestro, de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM), Rodrigo Archundia Barrientos, inició con la historia de los plagios, y en un momento afirmó que bajaron en 31 por ciento el índice de este delito en el Estado de México.

Señaló que los secuestradores han modificado sus objetivos y ahora no solo buscan a quienes tienen poder económico alto, sino que ahora van por cualquier persona como las de la tercera edad, menores de edad, personal de apoyo doméstico, taxistas, y hasta obreros.

La delincuencia ha dejado de ser selectiva, para ser genérica, por lo que recomendó presentar la denuncia en cualquiera de los casos.

También dieron una serie de recomendaciones como mantenerse siempre alerta al salir de casa, trabajo, escuela o reunión, registro actualizado del personal que labora en casa, mantener resguarda información económica –estados de cuenta, valores, etc…)

También piden modificar rutas de traslado, mantener comunicación con familiares, para evitar extorsiones, no proporcionar datos personales a extraños, denunciar delitos en el vecindario y proporcionaron el teléfono 01800 7028770 para denunciar las 24 horas una situación delictiva.

Sin embargo, entre los asistentes a la reunión quedó la sensación de por qué si saben tanto, sigue grave el problema, aunque prefirieron omitir su nombre.

 

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