Pensar positivamente te ayuda a vivir más y a ser feliz

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Por Guadalupe Camacho

La ciencia lo tiene claro tener una buena actitud y pensar positivamente aleja el estrés, incrementa la inmunidad y te permite dormir mejor

El que quiere de esta vida todas las cosas a su gusto, tendrá muchos disgustos.” Francisco de Quevedo, escritor español

Ser optimista, dicen los escritores y lo confirman ahora los científicos, es una de las claves para vivir con longevidad. No sólo se trata de no hacer corajes, sino que la ciencia lo ha demostrado: cuando vives con optimismo y buena voluntad, tu sistema inmune (el que te protege contra las enfermedades) se incrementa, al tiempo que duermes mejor y más profundamente.

Comenzar desde la infancia

“Optimism is associated with exceptional longevity in 2 epidemiologic cohorts of men and women” es el título de un estudio realizado por la Escuela de Salud de Boston, en el que se demostró que ser positivo ayuda mucho a tener una buena salud, especialmente si se comienza desde la infancia.

Los menores de edad que son enojones, ansiosos y huraños tienden a enfermarse con mayor facilidad puesto que no descansan correctamente, son regañados con frecuencia e incluso castigados.

Desde las etapas tempranas es fundamental que las personas sean positivas, optimistas y aprendan a tomarse la vida con felicidad, sin ser aprensivos, explica la científica, Lewina O. Lee, del National Center for Posttraumatic Stress Disorder, Veterans Affairs Boston Healthcare System, quien participó en el estudio de Boston.

Sabemos que ser optimista a veces es complicado, pero sí pensar positivamente es un atributo psicológico caracterizado como la expectativa general de que sucederán cosas buenas, o la creencia de que el futuro será favorable.

Ser optimista incrementa 15% tu años de vida

Por eso, las personas optimistas tienen menos probabilidades de sufrir enfermedades crónicas y morir prematuramente. Incluso, los resultados del estudio de Boston sugieren que el optimismo está específicamente relacionado con una vida útil más larga del 11 al 15%, en promedio, y con mayores probabilidades de lograr una «longevidad excepcional», es decir, vivir hasta los 85 años o más.

Estas relaciones eran independientes del estado socioeconómico, las condiciones de salud, la depresión, la integración social y los comportamientos negativos de salud como fumar y beber alcohol. En general, los hallazgos de este estudio, publicado en enero de 2019, sugieren que el optimismo puede ser el recurso psicosocial importante para extender la vida útil de los adultos mayores.

¿Cómo ser optimista?

No es necesario que todo lo que te rodee lo veas color rosa, sino que busques un modo positivo de ver la realidad. Es el típico ejemplo de: ver el vaso medio vacío o medio lleno, tú siempre tienes que verlo lleno.

Consejos básicos para que aprendas a vivir más ligero, más feliz y cumpliendo más años de vida saludable:

Aprende a aceptar cómo vives. Acepta lo bueno, pero también lo malo que hay en tu vida y cómo te ha afectado. Comienza a cambiar día tras día, y verás que la vida la disfrutarás mucho más, no se trata de vivir pasivamente sino que día a día cambies para bien. E incluso, podrás irte a la cama sin penas, desilusiones o tristezas que solo te restan sueño.

  Practica la conciencia plena. Es decir la meditación, tómate unos cinco minutos al día para tratar de dejar tu mente en blanco y en paz. Acepta a las personas como son y no trates de cambiarlas. El cambio está en ti.

Identifícate si eres pesimista u optimista. Observa cómo actúas frente a la vida, a los demás, a las circunstancias. Así que comienza a modificar hacia lo positivo, lo bueno, lo alegre. Ya verás que sí puedes ver la vida de otra manera.

Júntate con personas positivas. Evita a aquellos que siempre se están quejando, que siempre buscan el conflicto. Aléjate de las personas tóxicas que te ponen mal y de malas.

 Recuerda que no eres perfecto. No busques la perfección en ti, sino que valórate por todo lo que eres y si los demás no te aceptan o te critican, busca otros entornos. Incrementa tu autoestima todos los días. Y haz para ti el bien: come bien, duerme bien, camina, toma agua, lee. Es mejor estar en ti que en los otros.

 

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