Salma Hayek se atrevió y este miércoles denunció en un texto publicado en el diario The New York Times, el hostigamiento y acoso de que fue objeto por parte del director Harvey Weinstein, quien ha sido denunciado por otras actrices de Hollywood.
Harvey Weinstein también es mi monstruo» en la que denuncia que en 2001 fue acosada múltiples veces y presionada para grabar escenas de sexo en la cinta «Frida».
Valiente y contado en primera persona, la veracruzana lo describe como un cinéfilo apasionado, alguien que tomaba riesgos, un promotor del talento fílmico, un padre amoroso y también «durante años, fue mi monstruo.
«En este otoño me abordaron reporteros que dieron con mi nombre por varias fuentes, incluida mi querida amiga Ashley Judd, para hablar sobre un episodio de mi vida que, aunque es doloroso, pensé que había superado.
«Me había lavado el cerebro a mí misma, convenciéndome de que ya se había acabado y que había sobrevivido; eludí la responsabilidad de pronunciarme en público al respecto con la excusa de que ya había suficiente gente involucrada en poner los reflectores sobre ese monstruo personal. No pensé que importara mi voz o que usarla haría la diferencia», relata Salma.
Señala que no había hablado, porque intentaba protegerse y evitar explicarle varias cosas a sus seres queridos «y por qué durante tantos años había mantenido una relación cordial con un hombre que me hirió de manera tan profunda».
Además, denunció que en una ocasión llegó a decirle «te mataré, no creas que no soy capaz de hacerlo» y relató que tuvo que decirle «no» a Weinstein cuando le proponía «ducharse juntos», cuando se ofrecía para «darle un masaje» o para «practicarle sexo oral».
Se dice orgullosa de su capacidad para perdonar, «pero el simple hecho de que estaba apenada por tener que describir los detalles de eso que había perdonado me hizo preguntarme si realmente había hecho las paces con ese momento de mi vida».
Consulta el texto íntegro de la carta en esta liga a The New York Times
Harvey Weinstein dice no recordar nada
Tras la publicación de Salma, Weinstein respondió este jueves no recordar que haya presionado a Hayek para que grabara una escena sexual con Ashley Judd, pero sí que era «parte de la historia» porque la pintora mexicana era bisexual.
El sitio de noticias El Siglo de Torreón, publica que Weinstein admitió que en el rodaje de «Frida», una producción con un presupuesto de «más de 12 millones de dólares» en la que su empresa Miramax puso «la mitad del dinero», sí hubo «fricción creativa», pero a su juicio, sirvió para llevarlo «a la perfección».
Admitió que en el rodaje de «Frida» sí hubo «fricción creativa», pero a su juicio, sirvió para llevarlo «a la perfección».
Reconoció en Salma a una actriz «de primera clase», a quien llevó en varias de su sus películas, que estuvo «muy orgulloso» de su nominación al Oscar por «Frida» y que continúa «apoyando su trabajo». (Con información de The ew York Times y El Siglo de Torreón)