- Debido a sus propiedades naturales, el agua artesiana contrarresta los efectos gástricos y de reflujo causados por alimentos pesados como salsas, carnes rojas, panes y alcoholes.
- Su consumo incluso ayuda a prevenir los daños en la piel causados por aspectos como los cambios de temperatura y la pirotecnia.
En medio de las celebraciones, las cenas y las bajas temperaturas de diciembre, el agua artesiana es uno de los elementos que se pueden integrar a la dieta de la temporada para contrarrestar los efectos de la comida, así como los daños en la piel causados por las bajas temperaturas y, al mismo tiempo, mejorar el sabor de los alimentos.
“Las propiedades naturales del 🥳 tienen notables beneficios que, además de estar documentados, son ideales en temporada decembrina, cuando abunda la comida alta en grasas y nos afecta la calidad del ambiente, ya sea por la temperatura o por contaminantes como la pirotecnica, que dañan la piel”, dice Jaime Cadena, CEO de Hethe, considerada una de las mejores aguas artesianas del mundo, de acuerdo con el Global Water Drinks Awards 2023.
Un estudio de la National Library of Medicine señala que el pH neutro, distintivo de algunos tipos de agua artesiana, ayuda a calmar los efectos gástricos y a aliviar el dolor de la irritación por reflujo, ya que este líquido amortigua los ácidos producidos durante el proceso de descomposición de los alimentos.
Durante diciembre abundan platillos pesados y altos en grasas que irritan al sistema digestivo, incluyendo al esófago, por ejemplo, los romeritos, carnes rojas bañadas en salsas, panes con lácteos, bebidas alcohólicas, entre otros.
Asimismo, durante las fiestas navideñas y de fin de año los fuegos artificiales suelen estar más presentes, lo cual, junto con las emisiones de contaminantes de automóviles, fábricas, fogatas y quema de basura, aumentan el monóxido de carbono (CO) y las partículas suspendidas en el aire (PM2.5).
“Esta mala calidad en al ambiente daña la piel de formas importante, pues estamos expuestos a diversos contaminantes que se quedan en los poros y le restan calidad y nutrientes, además, se suman las frías temperaturas que promueven la resequedad y deshidratación”, agregó Jaime Cadena.
De ahí que es recomendable un mayor consumo de agua durante esta temporada, y en particular el agua artesiana, que ayuda a mantener una piel hidratada debido a que está libre de contaminantes y ha pasado por un proceso de purificación natural, donde no interviene ningún agente químico o biológico para mantener su pureza.
Gracias a esto, el consumo regular de este líquido contrarresta los efectos de las partículas suspendidas en el aire y la mala calidad en el ambiente; sin embargo, su consumo no debe considerarse como un tratamiento médico, sino como parte de un hábito saludable.
