El Estado mexicano se ha visto rebasado en temas de justicia, seguridad y derechos humanos, por lo que resulta importante comenzar a reforzar los conocimientos y mecanismos de acción para enfrentarlos coincidieron la secretaria General Académica de FES Acatlán UNAM, Goris Mayans y el ex procurador del Estado de México, Alfonso Navarrete Prida.
En el I Congreso Metropolitano de Política Criminal, en el que también participarán representantes del Instituto de Investigaciones Jurídicas, la FES Aragón, la Escuela Nacional de Ciencias Forenses, la Universidad Autónoma del Estado de México, la Universidad Autónoma Metropolitana, el Colegio de Morelos y la Universidad Anáhuac, el profesor del posgrado FES Acatlán, José Antonio Álvarez León, indicó que en los últimos 20 años el país ha atravesado reformas importantes como la del sistema de justicia penal (2008) y la de Derechos Humanos (2011).
Sin embargo, aún hay muchas cosas que resolver en materia de justicia, forense, de seguridad pública, de seguridad nacional y en materia de derechos humanos. “Esta es nuestra segunda coyuntura, y además es un momento para consolidar los primeros 39 años de política criminal en la FES Acatlán”, resaltó Álvarez León.
A su vez, Alfonso Navarrete Prida, en su alma mater, donde estudió la licenciatura en Derecho, dictó una conferencia magistral en la cual presentó cifras del INEGI sobre la impunidad que impera nuestro país: de cada 100 delitos cometidos, solo se denuncian 20, de los cuales, se consignan 10 y solo 5 tienen algún tipo de sentencia, a pesar de esto, el sistema penitenciario en México está rebasado.

Expuso que 98 por ciento de todas las sentencias que se aplican en el país son de pena mínima y solo el 2 por ciento son penas medias o máxima, lo cual les trae críticas constantes a los jueces, sin embargo, su actuar se debe a que la mayoría de casos los acusados son primo delincuentes.
Quien fuera subsecretario de Gobernación detalló que se debe hacer un esfuerzo enorme para poner en orden nuestro código penal, nuestro acuerdo de procedimientos penales, el sistema de impartición de justicia, los modelos de investigación, los temas de prevención delictiva, los temas de dilución del riesgo y de adaptación social.
“Los rezagos que tiene esta materia no se miden en pesos, se miden en años. ¿Cuántos años tendrían que pasar con presupuestos crecientes y caminando en una misma dirección para poder alcanzar estándares que la ONU califique de satisfactorios?”, dijo el ex titular de la Secretaría del Trabajo y Previsión social al exponer la complejidad del tema.
El exprocurador de Justicia del Estado de México detalló que nuestro país ha atravesado tres tipos de transiciones, la primera, es que su población pasó de ser rural a urbana, pues cerca del 78 por ciento de los mexicanos viven en ciudades y zonas metropolitanas; la siguiente transición fue la epidemiológica, la cual se dio con la disminución de la muerte infantil por enfermedades; y la tercera fue la transición democrática, con la construcción de pesos y contrapesos del poder.
El exdiputado federal de la 61 Legislatura indicó que dichas transiciones traen enormes retos al país como la situación de las pensiones o el acceso a empleos para la generación de jóvenes más educada de la historia.