Llegaron las vacaciones y los niños pasarán todo el día en casa, en el mejor de los casos jugando entre ellos. Pero… muchos otros destinarán muchas horas del día frente a las computadores por los videojuegos.
¡Cuidado! La adicción a los videojuegos propicia daños emocionales, falta de socialización y afectaciones físicas que se agravan paulatinamente, por lo que la Secretaría de Salud del Estado de México aconseja a los padres de familia restringir el uso de estas tecnologías y supervisar las conductas de los menores que las utilizan con frecuencia.
Recientemente la Organización Mundial de la Salud (OMS) consideró a esta adicción como una enfermedad mental, por lo que la dependencia señala que este trastorno perjudica principalmente a jóvenes menores de 20 años que al no lograr avanzar las etapas les provoca angustia severa, baja autoestima, cambio de conductas y disminuye la relación con familiares; también niegan la adicción y se resisten a la atención médica.
Advierte que los pequeños, aunque también los adultos, que usan en exceso consolas, tabletas o celulares para jugar, pueden sufrir:
- Sueños alterados
- Pérdida del sentido de la realidad
- Problemas de dieta
- Deficiencia en la actividad física:
- Comportamiento agresivo porque generalmente estos juegos son bélicos.
Efectos del uso excesivo de videojuegos:
- Resequedad e irritación en los ojos
- Dolor en tendones y músculos de los dedos por uso de controles
- Vejiga obstructiva y colon irritable, principalmente en niños pequeños que al jugar omiten necesidades fisiológicas
- Estrés
- Sudoración
- Taquicardia.
Para evitar estas complicaciones o enfermedades se recomienda disminuir gradualmente el uso de estos dispositivos y a los padres de familia establecer condiciones, frecuencia y horarios para usarlos.
Su tratamiento requiere de apoyo familiar para reconocer esta adicción y se debe acudir con un psicólogo para identificar el nivel de afectación.